Pienso,
luego soy uno más
Carta dirigida a todos los que os relacionáis conmigo:
Hola, soy uno más aunque tú, ser humano que me lees, creas
que soy menos, un minus. Soy uno más-válido aunque tú me minus-valores y sólo
me veas como un minus-válido. Mírame como persona, despójate de tus ojos y de
tus prejuicios y deja de fijarte en los rasgos de mi cara o en mis defectos
físicos o en mis limitaciones a la hora de expresarme. Fíjate en lo esencial que es invisible a los
ojos y verás a un más y no a un menos.
Yo, ese ser al que todos los días miráis, va a comenzar en
el centro un nuevo taller titulado Programa de pensamiento libre. No se
trata de otro más, de un nuevo programa para enseñarme las temibles asignaturas
con las que ya fracasé por las dificultades de mi inteligencia. No. Se trata de
un programa que me considera con capacidades y potencialidades suficientes para
pensar acerca de cuestiones vitales como mis valores, mis emociones o mis
ideas, porque mis educadores consideran que no sólo deben ver los defectos en nosotros
si no las muchas virtudes que tenemos y por eso quieren trabajar con nosotros
no tanto como individuos con cierto retraso, sino como personas con muchos
valores. Por eso, os pido también que colaboréis conmigo en un diario que
empezaré a llevar en el taller y que consistirá en que expresaré ahí mis ideas,
creencias, sueños, inquietudes, reivindicaciones, dilemas. Hablaremos de muchas
cuestiones relacionadas con la vida misma, en nuestra reunión de autogestores,
y luego nos pedirán que escribamos cada uno lo que pueda, pero ese cuaderno,
insisto, no es de ejercicios para ser corregidos y calificados como bien o mal,
sino para que nosotros expresemos lo que pensamos y esto siempre, siempre, está
bien, muy bien. No habrá calificaciones ni personas mejores o peores, todos
serán iguales y cada uno con arreglo a sus posibilidades escribirá más o menos.
A veces os haremos preguntas para que vosotros dialoguéis con nosotros con
normalidad, tratándonos como personas que tenemos esa capacidad esencial en
todos los seres humanos, la capacidad de pensar. Confiad en mí y animadme
cuando hable de temas del taller con vosotros. Creed en mí. No olvidéis que mi
objetivo es ser cada vez más autónomo y esta autonomía conllevará más calidad
de vida para todos.
Fdo: “ Los Gestores
de la Serena”
No hay comentarios:
Publicar un comentario