miércoles, 16 de mayo de 2012

Pienso, luego soy uno más


Pienso, luego soy uno más

Carta dirigida a todos los que os relacionáis conmigo:
Hola, soy uno más aunque tú, ser humano que me lees, creas que soy menos, un minus. Soy uno más-válido aunque tú me minus-valores y sólo me veas como un minus-válido. Mírame como persona, despójate de tus ojos y de tus prejuicios y deja de fijarte en los rasgos de mi cara o en mis defectos físicos o en mis limitaciones a la hora de expresarme.  Fíjate en lo esencial que es invisible a los ojos y verás a un más y no a un menos.
Yo, ese ser al que todos los días miráis, va a comenzar en el centro un nuevo taller titulado Programa de pensamiento libre. No se trata de otro más, de un nuevo programa para enseñarme las temibles asignaturas con las que ya fracasé por las dificultades de mi inteligencia. No. Se trata de un programa que me considera con capacidades y potencialidades suficientes para pensar acerca de cuestiones vitales como mis valores, mis emociones o mis ideas, porque mis educadores consideran que no sólo deben ver los defectos en nosotros si no las muchas virtudes que tenemos y por eso quieren trabajar con nosotros no tanto como individuos con cierto retraso, sino como personas con muchos valores. Por eso, os pido también que colaboréis conmigo en un diario que empezaré a llevar en el taller y que consistirá en que expresaré ahí mis ideas, creencias, sueños, inquietudes, reivindicaciones, dilemas. Hablaremos de muchas cuestiones relacionadas con la vida misma, en nuestra reunión de autogestores, y luego nos pedirán que escribamos cada uno lo que pueda, pero ese cuaderno, insisto, no es de ejercicios para ser corregidos y calificados como bien o mal, sino para que nosotros expresemos lo que pensamos y esto siempre, siempre, está bien, muy bien. No habrá calificaciones ni personas mejores o peores, todos serán iguales y cada uno con arreglo a sus posibilidades escribirá más o menos. A veces os haremos preguntas para que vosotros dialoguéis con nosotros con normalidad, tratándonos como personas que tenemos esa capacidad esencial en todos los seres humanos, la capacidad de pensar. Confiad en mí y animadme cuando hable de temas del taller con vosotros. Creed en mí. No olvidéis que mi objetivo es ser cada vez más autónomo y esta autonomía conllevará más calidad de vida para todos.


 Fdo:   “ Los Gestores de la Serena”

No hay comentarios:

Publicar un comentario